domingo, 17 de abril de 2011

Sin sentimientos encontrados.

Casi un mes sin subir nada. Nada, nada, nada nuevo. La vida se me hace aburrida, la verdad. Sin sentimientos encontrados, es como que la emoción de vivir se va. Sé que suena dramático, pero para mi es así. Sin ese sentimiento de ansiedad cuando vez a alguien, sin ganas de llorar cuando te pasa algo que no soportás. N A D A .

Últimamente lo único que me hace sentir algo es el fútbol. No es algo oh-tan-raro en mi, pero bueno. Si considerás que hasta hace no mucho, ver a un cierto alguien me generaba más ansiedad que un Clásico Barça-Madrid, es un tanto raro.

Me quejaba de andar llorando por alguien, o vivir expectante de que ponía en su Face, con quien estaba y todas esas manos, y ahora lo extraño. Extraño vivir pendiente de mis emociones, que me hagan hacer locuras que a la larga o a la corta se convierten en lindos recuerdos. Bueno, lindos recuerdos o lecciones de vida.

Un caso de lección sería... El caso de Renzo. Un pibe del que estuve enamorada por un año y meses. Nunca me dio bola y yo atrás de el, expectante a todo lo que hacía. Me decía "Hola peque :)" y yo me moría del amor. Nunca nada, pum, pam. Yo bombardeandolo a indirectas y el nada. Alguna que otra, pero no eran al final. Y yo qué hacía? Me daban ataques emo. ZAS, me pelée con el, y me di cuenta de que autoflagelarme era al REVERENDÍSIMO PEDO. Lección de vida, IMPORTANTíSIMA.

Un ejemplo de lindo recuerdo... España campeón del mundo (Sí, NECESITO poner algo de fútbol sino no soy yo). Me acuerdo que yo desde que España salió campeón de la Euro venía diciendo "España gana el mundial", "El mundial es de España". Todos me decían "No, ni en pedo, país de mierda", "nunca ganaron un mundial, no tienen chance". Esos mismos, cuando empezó el mundial y España perdió contra Suiza (si mi memoria no me falla...), me empezaron a bardear. "¿Qué pasó con tu España? Jaja", "España perdió... ¿Campeones? ¿Te parece?", entre otras cosas. Me acuerdo que empecé a ratearme abundante del liceo para ver todos los partidos de España, y ahí ven mi recompensa. ¡España campeona del mundo! Lindo recuerdo que algún día podré contarle a mis hijos.

Por cosas así vale la pena reir, llorar, enojarse, pasar nervios. Vale la pena SENTIR por cosas así. A medida que voy creciendo me voy dando cuenta de que, efectivamente, TODO pasa por algo. De que todo lo que vivimos tiene un por qué, y todo, tanto lo malo como lo bueno, nos hace ser quien somos. Tal vez nadie sea perfecto, pero somos personas únicas y es así como debe ser todo.

Me fui de tema totalmente, se desvirtuó todo al mango... No interesa... En resumen, a pesar de que cuando siento algo me quejo, cuando estoy un largo tiempo sin sentir nada, llego a extrañarlo. Al punto tal, que llego a reflexionar sobre todo lo ocurrido y saco lo positivo de todo lo que me pasa. ¿No créen?


Gràcies per llegir les meves bogeries.
Petons, feniu.

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